Seguramente tengas en la retina la imagen de los niños en verano disfrutando del frescor de la limonada. Y es que, sin darnos cuenta, es un refresco que ya forma parte de la cultura mundial igual que las grandes marcas de refresco, con la diferencia de que la limonada es más antigua, y sobre todo natural.
A pesar de estar familiarizados con ella y del nuevo auge que está consiguiendo, no mucha gente sabe dónde y cómo surgió la limonada, algo casi tan antiguo como la propia sed. Conocer su origen, y ya de paso, aprender cómo hacer una deliciosa limonada puede serte muy útil para conocer un poco más de este refrescante y riquísimo refresco natural.
El refresco universal
Tan antiguo es el origen de la limonada que debemos remontarnos hasta el Egipto medieval del siglo XIII. En algunos antiguos papiros se encontró la elaboración de una bebida a base de zumo de limón, que, principalmente, se pensaba que era elaborada por los judíos de Egipto. Lo que sí es seguro es que fueron ellos los que la exportaron al resto del mundo, prueba de ello es la fama que alcanzó en España al siglo siguiente, cuando se consumía la limonada el día de Pascua, en el cual estaba prohibido beber vino puro.
Pero el auge de la limonada, sin duda, llegó en Francia en el siglo XVII. Al jugo de limón los franceses le añadieron agua con gas y miel, surgiendo la primera compañía de Limonadiers.
La típica estampa de Estados Unidos
Si piensa en el típico verano, en el típico barrio de los Estados Unidos, seguramente no falte la limonada casera en tu imaginación, ya que numerosas películas y series de televisión nos muestran los típicos puestos de limonada de los niños en verano.
Pero al margen de esta imagen idílica, la popularización de la limonada en Estados Unidos surge en una época convulsa. En 1877 se promulgaba una de las leyes más famosas que se aplicaron en este país, la famosa ley seca. Y mientras en algunas ciudades como Chicago se formaba el caldo de cultivo de lo que luego serían los mafiosos americanos más famosos, la limonada ocupaba los vasos de los americanos como sustituto del alcohol. Y algo que se usó como alternativa, vino para quedarse.
Cuando la ley seca fue derogada, la limonada ya había calado en los ciudadanos, que la adoptaron como bebida para refrescarse en verano, algo que quedará en el imaginario de su cultura para siempre.
Como puedes ver, la limonada es una bebida que a lo largo de la Historia se ha ido extendiendo por todo el mundo, sin importar la cultura y el lugar, tratándose de una bebida de lo más natural y casera. Esto también ha provocado que haya diferentes modos de elaborar la limonada, por lo que además tenemos la suerte de poder elegir cómo hacerla.
El secreto: un producto casero
Como se suele decir, cada maestrillo tiene su librillo, y en el caso de la limonada no podía ser de otra manera. Esta bebida es tan internacional que podemos encontrar muchas maneras de elaborarla, así como diferentes gustos como, por ejemplo, que sea más o menos dulce.
Una de las limonadas más famosas es la americana. Esta cuenta con ingredientes como la lima o la ralladura de limón. Lo que está claro es que el elemento protagonista es el limón, que además de ofrecer una bebida refrescante, supone un aporte de vitaminas C, E, y B que ayudan a nuestro organismo. Además, su zumo es bajo en calorías.
Lo más sencillo del mundo
La razón quizá más importante del triunfo de la limonada es que resulta algo muy natural y sencillo de hacer. Los limones son una fruta que crece en todas las partes del mundo, y elaborar limonada es algo que puede hacer cualquiera, algo que podrás comprobar ahora al ver los ingredientes y su modo de preparación:
- Para preparar algo más de un litro de limonada necesitas 4 limones, a los que quitarás la piel y batirás junto con la mitad del agua, que serán unos 250 ml. Cuando quede bien batido puedes pasarlo por un colador o, si lo prefieres, deja los grumos.
- Solo te queda verter el resto del agua, la otra mitad, y el azúcar a tu gusto; con 80 gramos para estas cantidades sería suficiente. Por último, añades el hielo y vuelves a triturar todo. Ahora solo queda servir y disfrutar antes de que se caliente.
Fácil, sano y refrescante
Ahora que conoces el origen de esta bebida tan popular, es fácil hacerte una idea de cómo ha sobrevivido a lo largo de la Historia. Y es que si este refresco se sigue elaborando de la manera tradicional, es porque no hay otra manera de disfrutar algo tan bueno y refrescante.
Fuentes:
https://www.cinconoticias.com/historia-de-la-limonada-del-siglo-xiii-a-la-actualidad/
https://elcomidista.elpais.com/elcomidista/2010/07/02/receta/1278087135_127808.html
https://saboresymomentos.es/limonada-casera-receta-facil/
https://www.65ymas.com/salud/alimentacion/limonada-natural-sana_4964_102.html